Días de frío intenso los que estamos soportando por tierras sorianas. Temperaturas gélidas por la noche, pero bastante agradables durante el día.
Becadas pocas y super esquivas.
Así comenzamos a cazar
Alguna picada de becada y sus huellas, marcadas sobre el terreno cuando aún no se había helado,nos inducen a pensar que la picuda está cerca.
Huellas de becada
Premioooo. Después de algunos lances que ya han quedado grabados a fuego en nuestra retina, conseguimos abatir una becada.
Como no. Tenía que ser Brisa la que bloqueara la preciosa becada
Los tres mosqueteros después de un bonito día
Y debajo la que nunca falla. Nunca se cansa y siempre nos guía hacia la pieza.
Adraa con su botín
La becada de abajo, había entrado hacía poco en nuestro monte, ya que aunque era grande, (63 cm de envergadura) solo pesaba 300 gramos y marcaba bastante la quilla
Precioso lance con esta gran sorda
Tiempo de pitorras
ResponderEliminar